MI CIUDAD
Ciudad de los ruidos hirientes,
popó y basura dispersas.
Caninos en jauría,
y noches destempladas.
La piedra cedió al asfalto,
cercaron tus plazas y alegrías,
socavaron tus entrañas
e iluminaron tus tristezas.
Te lavaron la cara,
te peinaron raya al medio
emperifollaron tu vestido
pero sigues siendo tú.
A la mitad les encanta ,
a la mitad les molesta,
divergencias de criterios,
sustento de vanas peleas.
Avanza, la ciudad avanza,
clama la proclama,
sin importar las quejas,
la mayoría avala.
Que el hospital, la escuela,
la basura y la porfía
del tránsito maniatado,
y nadie jugando a la rayuela..
Siempre falta uno para el peso,
siempre hay de que quejarse.
no hay perro que no tenga hueso
y pulgas para rascarse.
El miedo de día y de noche,
anida espectrales sensaciones.
Rejas, blindaje y electrificadas murallas
mientras la inseguridad reina.
Pero a pesar de esto y todo,
yo tengo esperanzas, buenas no vanas,
que pronto volverá la alegría en tu gente
saldrá el sol y existirá un mañana.
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